En el Sónar
no solo hay música y conciertos. Hay más. Como los dispositivos que
analizan el estado de ánimo y eligen la música que mejor convenga a la
emoción del momento, además de videojuegos teledirigidos con los latidos
del corazón. Eso es lo que se vio ayer durante la maratoniana jornada
del Music Hack Day en el Sónar+D, el laboratorio tecnológico del
festival.
Con la música y la neurociencia como armas de trabajo, más de 100 hackers
de todo el mundo han tecleado y programado ininterrumpidamente durante
24 horas para desarrollar aplicaciones musicales que funcionan a través
de los movimientos involuntarios del cuerpo como el ritmo cardíaco, la
respiración o las ondas cerebrales. “Vamos a cambiar la industria
musical. Queremos introducir la tecnología y abrir más la industria”,
explicó el promotor del Music Hack Day, Xavier Serra. La organización
calcula que el 20% de los proyectos desarrollados durante la jornada
acabaran comercializándose.
La Mobile World Capital Barcelona también ha querido participar en el
evento y apostar por trasladar la tecnología desarrollada en el Sónar+D
hasta los dispositivos móviles.